Los jóvenes también están llamados a vivir y profundizar en estas dos invitaciones que nos hace el Papa para crear un mundo diverso donde reine la paz y la vida, donde se tenga compasión y misericordia por las personas y por todo lo creado.
A ti que eres joven ¿cómo entiendes la misericordia?
Primero que todo, creo que es un regalo de Dios, es una manifestación de su Amor: “al que mucho ama mucho se le perdona” y nuestro Dios es Amor y Perdón, cuando pienso en misericordia pienso en cómo Dios ve más allá de nuestros pecados y nuestras faltas y mira, solo mira en lo más profundo, ahí donde está lo bueno que El mismo ha puesto: “Dios ama al pecador pero detesta el pecado”.
¿Cómo ser testimonio de la misericordia?
Nuestro Dios es misericordioso y su misericordia brota del Amor y el Perdón, porque El no nos juzga como los hombres, sino que nos comprende, el mismo evangelio nos invita a ser misericordiosos como el Padre es misericordioso. Creo que para ser testimonio de misericordia, debemos pensar en no ser prejuiciosos, el Papa Francisco cuando habla sobre la misericordia, siempre menciona que debemos pensar en las demás personas sin juzgarlas y que nosotros mismos hemos sido perdonados por Dios. No recuerdo en que homilía nos invitaba a que antes de juzgar a alguien pensemos en qué cosas peores hemos hecho y así podemos entender a nuestros hermanos y no caemos en prejuicios.
¿Cómo ser compasivos con el dolor del mundo?
Me resulta sumamente frustrante como los medios de comunicación y la tecnología nos permiten saber lo que está sucediendo en este preciso momento a kilómetros de distancia y solo poder apreciarlo como un espectador… eso es complicado… pero una vez un sacerdote decía que la oración es un instrumento que Dios nos facilita para poder estar presentes en cualquier lugar en cualquier momento y que cuando no podamos hacer físicamente… el poder de la oración, en algunas circunstancias, es más valioso que el de la acción. Bueno eso me consoló un poco.
San Francisco de Asís fue un joven enamorado de la naturaleza, entraba en comunicación con todo lo creado y llegaba al punto de predicar a las flores “invitándolas a alabar al Señor, como si gozaran el don de la razón.
¿Crees que este santo era un loco al hacer esto, o tenía algún sentido?
Si creo que estaba loco, loco por Dios, de esa locura de la que nos habla el evangelio; seguramente hoy veo a alguien hablando con una rosa y pensaré que está muy loco; pero San Francisco no lo hacía solamente por conversar, sino que podía ver las maravillas de la creación en esos detalles y esto me encanta, porque podía ver a Dios en todo, podía admirar en cada cosa la creación de Dios y cómo Dios se manifiesta con detalles, Francisco invitaba a alabar al Creador a todo aquello en lo que él podía ver Vida.
Y tú ¿cómo vives tu vida en relación con la naturaleza?
La naturaleza me encanta, cuando estaba en la Universidad solía irme a acampar con mis amigos, siempre que podía, me alejaba un poco del grupo y me quedaba sentada y callada…. Admirando todo lo que tenía a mi alrededor, como esperando a que me hablara, quizá por eso me gusta la locura de San Francisco jajaja!! Cuando te tomas el tiempo para admirar las maravillas del Creador, comienzas a desarrollar una sensibilidad que te permite valorar mejor esas cosas que quizás antes eran insignificantes, por ejemplo: una vez fui a una catarata y recuerdo que quedé maravillada con su belleza y un muchacho nos contaba que antes era mucho más grande. Ahora en mi casa ando siempre detrás de todos cerrando los tubos o diciéndoles que no duren tanto en la ducha; creo que aunque hagamos poca cosa, cuando nos juntamos todos se hace mucho no?.
¿Para qué nos necesita la tierra?
Creo que somos parte de este “gran todo”, y Dios nos ha dado la capacidad de pensar, de razonar, una virtud que no le dio a otras creaturas; éste don es el que nos permite crear cosas que ayuden a mejorar la situación en la que vivimos, creo que hoy más que nunca la Tierra nos necesita, pero lamentablemente, pienso que, en este momento, nos necesita porque somos los únicos con la capacidad de solucionar las problemáticas que nosotros mismos, seres humanos hemos creado.
El Papa Francisco en la encíclica Laudato Si nos dice que “los jóvenes reclaman un cambio”. ¿Qué piensas de esto?
Es muy bueno escuchar al Papa Francisco dándonos siempre un lugar a todos los jóvenes, nos invita a reclamar, a hacer lío como dice él, porque sabe que como jóvenes tenemos esperanzas, metas y sueños y él cree en la fuerza y la energía que tenemos para ir adelante por esos ideales. Muchas veces lo que ocupamos es que alguien crea en nosotros y no solamente juzgue nuestra manera de actuar o pensar.
¿En qué se tendría que cambiar? ¿Qué sugieres?
Creo que el cambio más necesario en este momento no es general, sino individual, es de cada uno. Pienso que hoy, los jóvenes somos invitados al conformismo, al egoísmo del bienestar propio y parte de este cambio nos exige, como el mismo Papa dice: “salir, ir a las periferias” y ver las necesidades de los otros, cambiar la manera de pensar creo que es el primer paso, existen muchos jóvenes con ideales grandes, los conozco, he visto amigos con ideas grandes, pero el egoísmo… la manera de pensar de la sociedad de hoy, los devuelve “a su lugar”. Creo que el Papa Francisco es una gran evidencia de que el cambio de pensamiento trae consigo grandes consecuencias, es un gran ejemplo para nosotros los jóvenes y nos alienta.. a ser diferentes, a pensar diferente y a creer en esos ideales.
Terminamos con esta frase que dijo el Papa en la Conferencia de prensa en el vuelo hacia Manila durante su viaje apostólico a Sri Lanka y Filipinas, 15 de enero de 2015:
“…un viejo campesino me dijo una vez: “Dios perdona siempre, nosotros los hombres – perdonamos algunas veces, la naturaleza no perdona nunca”. Si la maltratas, ella te maltrata.
Así vemos conjugados el amor a la misericordia y la necesidad de respetar la naturaleza que nos da vida.
Joven tu que tienes el futuro en tus manos abre tus horizontes para crear este mundo soñado por Dios. Un mundo donde la creación sea el paraíso que El creó y que las personas lo cuidemos, admirándolo y respetándonos entre todos con entrañas de misericordia. ¡LANZATE A LA VIDA Y LA VIDA TE LO AGRADECERA’!
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